En este año veremos avances muy significativos en el desarrollo de las redes eléctricas descentralizadas.

Este modelo se basa en el uso de pequeños generadores de fuentes renovables, con diferentes sistemas de almacenamiento, en las comunidades de vecinos.

Las iniciativas energéticas descentralizadas tienen el potencial de democratizar la generación de la energía.

Entre otras ventajas, aprovechan los recursos locales, eliminan las perdidas asociadas a la distribución y reducen las emisiones de carbono.

Por último, aunque la Unión Europea es la tercera economía más grande del mundo, en el 2023 no se la considerará un líder en el sector tecnológico.

Europa es el hogar de tan solo el 13% de las empresas tecnológicas más importantes del mundo. El bloque europeo va a la zaga de Japón y Corea del Sur, y también se ha quedado notablemente atrás respecto a Estados Unidos y China en la creación de gigantes tecnológicos, como lo fue en su día Nokia en Finlandia.

A lo largo del año, iremos viendo como todos estos nuevos desarrollos tecnológicos de 2023 se van implantando.

La tecnología seguirá liderando los cambios del mercado y la industria como viene sucediendo los últimos años.